El horno solar como alternativa

Los hornos solares se han usados en lugares donde no hay energía eléctrica o suficiente combustible para poder cocinar. Estos hornos son útiles como una medida preventiva contra la deforestación en países donde se cocina con leña.
Existen varios modelos y materiales que pueden usarse según las posibilidades de su constructor. Hay quien los fabrica de metal con un reflector parabólico y hay quien los fabrica de tan sólo cartón con papel de aluminio en un diseño bastante sencillo. Tiene tres componentes básicos: un reflector para dirigir la luz solar hacia la olla, una bolsa de plástico que hace las veces de horno y la olla o recipiente oscuro con tapa para colocar la comida.
Ya hay compañías que los venden y algunas se dedican a venderlos mayormente a organizaciones que ayudan a países en crisis. El horno solar funciona. Es una alternativa real para el uso cotidiano, ahorra energía y nos ofrece la tranquilidad de saber que no dependemos de ningún combustible para alimentar a una familia.

Alerta sobre recipientes plásticos

Desde hace algún tiempo se nos ha alertado sobre la toxicidad de los recipientes plásticos. Los medios de comunicación nos han informado que según estudios uno de los tóxicos encontrados en personas con cáncer es el mismo tóxico que libera el plástico cuando cambia de temperatura y que es utilizado en las botellas de agua que compramos a diario. Usted mismo, en su propia nevera al menos puede comprobar que ocurre un cambio notable entre lo guardado en un recipiente de cristal y uno de plástico. El agua donde fueron hervidas zanahorias y papas y luego guardada en la nevera en un recipiente plástico (recipiente a la derecha en la foto)al día siguiente estaba de color verde claro y a los tres dias verde oscuro. El agua donde fueron hervidas zanahorias con papas y luego guardada en la nevera en un recipiente de cristal(recipiente a la izquierda en la foto) mantuvo su color original.Qué ocurrirá con el agua que tomamos de botellas plásticas cuando cambian de temperatura? Ya nos alertaron. Como el agua es incolora y no podemos notar los cambios a simple vista, las personas siguen comprando y consumiendo el agua embotellada en recipientes plásticos mientras el cáncer hace estragos.